Abatido: La imagen del miliciano muerto supuso una mirada heroica de la muerte en la Guerra Civil, una visión casi romántica. Supuso una gran revolución para el fotoperiodismo, porque se creía que era algo espontáneo, recogida justo en el momento oportuno.
Quien es: Según Robert Capa, seudónimo de Endro Friedmann, retrató en el Cerro Muriano a un anarquista en el mismo instante que le herían de muerte. El problema reside en la variedad de interpretaciones de cómo se hizo la fotografía, por eso se ha debatido muchísimo acerca de su veracidad. Actualmente, no se ha identificado al miliciano con toda seguridad, habiendo varios nombres que se barajan.
Campo de batalla: Robert Capa se caracterizaba por hacer fotografías de guerra a pie de batalla. Iba con los soldados a captar las fotografías en el mismo instante que sucedían, de ahí su gran valor histórica y artístico.
Contrapicado: Capa tenía la costumbre de realizar contrapicados en sus fotografías para ensalzar las figuras, para hacerlas más heroicas.
Brazos: Los brazos en cruz imprimen velocidad y movimiento a la escena, así como un aumento de la grandiosidad de la muerte.
Nítido: Capa usaba paisajes poco nítidos, como barridos de imagen, muy probablemente porque hay que tener en cuenta que era un campo de batalla y se requería rapidez. Usaba una cámara Leica, con la que hacía grandes barridos para generar mucho movimiento a la escena.
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